Pese a la petición de los presos separatistas, el Tribunal Supremo no ha cedido al chantaje de los golpistas y mantendrá en prisión a todos los acusados en el juicio del procés. El juez Marchena no aprecia ninguna razón para liberarles, teniendo en cuenta que existe un gran riesgo de fuga, como ya sucediese en su momento con Puigdemont.
Joaquim Forn, Josep Rull, Jordi Turull, Jordi Sánchez, Carmen Forcadell y Dolors Bassa habían solicitado su puesta en libertad durante el tiempo de espera de la sentencia. Sin embargo, tendrán que continuar en prisión hasta que los magistrados hagan pública la sentencia del juicio.
No obstante, tal como solicitaron, serán trasladados a Cataluña para continuar su prisión preventiva en Lledoners, ya que el Supremo no ha visto motivos para que no sea así. La Generalidad de Cataluña ya ha preparado su regreso dejando libres 60 camas para que los presos golpistas no se encuentren agobiados y tengan más espacio a su disposición. De este modo, pese a que no podrán salir de prisión, se sentirán como en casa.
Cada vez queda menos tiempo para que se haga pública la sentencia del caso, no obstante, las aparentes negociaciones de Pedro Sánchez con ERC no auguran nada bueno a los españoles. El temor de que Sánchez indultará a los golpistas cada día es más palpable entre los políticos de PP, Ciudadanos y VOX. A nadie le extrañaría, ya que ha traicionado al país en repetidas ocasiones.