Un valiente Guardia Civil ha resultado herido después de intentar frenar a un inmigrante palestino que trataba de colarse en España a la carrera a través de la frontera entre Melilla y Marruecos.
Tal como han adelantado desde la Guardia Civil, los hechos tuvieron lugar durante la tarde de ayer. Alrededor de las 18.30, un ciudadano de origen palestino inició una carrera tratando de atravesar la frontera española. En su intento arrolló a un agente que terminó en el suelo, con heridas de diversa consideración, después de intentar detenerle.
Se trasladó al agente al Hospital Comarcal para su diagnóstico. Presenta un cuadro con múltiples contusiones de carácter leve en pierna, brazo y rodilla. Al agresor, se le ha conseguido detener y ahora se le imputan diversos delitos. El más grave es atentado a la autoridad.
Este problema no es un hecho aislado. Hace sólo tres meses ocurrió un hecho similar en otro de los puestos fronterizos de la ciudad. En aquella ocasión, el agente que se lanzó a la caza del inmigrante que trataba de entrar en España terminó en el hospital con un fuerte golpe en la cabeza que le mantuvo varios días ingresado en estado grave.
En la frontera los Guardias Civiles no cuentan con las herramientas necesarias para hacer valer su autoridad en situaciones como la ocurrida ayer. La Asociación Justicia para la Guardia Civil ya ha reclamado que se aumenten las dotaciones de seguridad para todos los efectivos que se encuentran destinados en los puestos fronterizos.