Italia y Hungría son dos de los países que más cara están plantando a las políticas proinmigración ilegal que defiende la Unión Europea.
Viktor Orbán, presidente de Hungría y Matteo Salvini, ministro del Interior de Italia formarán una alianza de cara a las elecciones europeas que tiene como gran objetivo acabar con la islamización que se está produciendo en ciertos países de la Unión Europea.
Esta pasada semana ambos dirigentes se reunieron para tratar el futuro de Europa y principalmente, la problemática de la inmigración ilegal que sigue afectando a ciertos países como España.
Viktor Orbán, presidente de Hungría, dejó claro que tanto su país como Italia han demostrado que «la inmigración ilegal puede ser detenida»: «Ambos países hemos luchado para frenar la llegada de inmigrantes ilegales y lo hemos conseguido. Aquellos países que no ponen fin a la inmigración ilegal es simplemente porque no quieren hacerlo».
Desde Italia, Matteo Salvini tiene claro que una victoria de la izquierda llevaría a Europa a un auténtico fracaso: «Espero que haya un cambio. Si la izquierda gana, Europa se convertirá en un califato islámico«.
Desde que Salvini llegó al Gobierno italiano, Italia ha visto reducida casi al 100% la llegada de inmigrantes ilegales.
En las europeas mi voto sera para VOX. Es donde se diseñan las politicas suicidas europeas. Necesitamos un frente común que ponga orden.