Gracias a los votos de PSOE, Podemos, Izquierda Unida e incluso Ciudadanos, los alumnos de la ESO y Bachillerato deberán estudiar la asignatura ‘Ley de Memoria Democrática’ cuyo único objetivo es imponer «una verdad histórica incontrovertible» que será decidida por el ‘Consejo de la Memoria Democrática’.
Dicho Consejo estará formado por políticos de la extrema izquierda y la asignatura ha sido aprobada gracias a los votos de la izquierda, mientras que PP y Foro votaron en contra al considerar innecesaria una asignatura que trate de imponer la historia como algunos quieren hacer creer que fue.
El propio Gobierno asturiano será el responsable de proceder a «la actualización de los contenidos curriculares para ESO y Bachillerato en las áreas de Ciencias Sociales, Geografía e Historia, con el fin de garantizar que estos ofrezcan información veraz, extensa y actualizada sobre los acontecimientos del pasado vinculados a la memoria democrática del Principado de Asturias, incorporando los nuevos enfoques y resultados de la investigación historiográfica en los últimos años e incluyendo la perspectiva de género».
Además, los alumnos podrían estar obligados a participar en actividades extraescolares «que refuercen suficientemente los contenidos curriculares, incluyendo la realización de visitas a rutas y lugares de memoria».
Impondrán a los alumnos la idea de que la represión durante el franquismo fue de una dureza extrema
Para saber qué tiempo de adoctrinamiento recibirán los alumnos, solamente hace falta leer uno de los párrafos en el que se dice que «la represión durante el período bélico y en la posguerra fue de una dureza extrema: campos de concentración, batallones de trabajos forzados, encarcelamientos masivos, ejecuciones extrajudiciales, exilio, etcétera, fueron la tónica de la primera posguerra, junto con la resistencia, principalmente en los montes asturianos, de grupos guerrilleros republicanos hasta los años 50 del siglo XX. Desde los inicios del movimiento contra la legalidad republicana, los golpistas desencadenaron un auténtico baño de sangre que tenía por objeto la eliminación de aquellos a los que consideraban enemigos de España».