Durante 2017 los inmigrantes que se encuentran en España mandaron nada menos que 15.760 millones de euros a sus países de origen, es decir, con sus remesas de dinero redujeron la cifra de dinero en España en esa cantidad. Es solo la primera piedra sobre la que se sustenta el drama económico que la inmigración está causando en nuestro país.
Lo primero que aprenden muchos alumnos es español
Uno de los mayores gastos que realiza cualquier país es en educación. Según los propios datos que maneja el Ministerio de Educación, actualmente contamos con 748.000 alumnos extranjeros en nuestro país. Un 8,8% del total. Aquí no contamos a aquellos que poseen la nacionalidad, que por supuesto son españoles de pleno derecho.
Teniendo en cuenta que el gasto medio en nuestro país por alumno -de nuevo según datos del ministerio, calculando los 51.000 millones gastados entre el total de alumnos- asciende a 6.285€. Por tanto, el gasto en Educación para los extranjeros supone alrededor de 4.760 millones de euros anuales.
Pacientes llegados de todo el mundo
Otro de los principales gastos se encuentra en la Sanidad. Durante 2017, España invirtió 72.812,9 millones de euros en Sanidad, con un coste de 1.565€ per cápita. De modo, que contando que en España se encuentran censados 4.719.418 extranjeros, el gasto total ascendió a 7.385 millones de euros.
Perdemos en todos los aspectos
En lo relativo al coste del desempleo entre los inmigrantes, si tenemos en cuenta el mismo porcentaje que entre el resto de ciudadanos -aunque es relativamente más alto- llegamos a encontrarnos con otra cifra sorprendente. 1.740 millones. Sin contar las ayudas que a mayores estos colectivos suelen recibir de parte del sector público, que en un análisis tan a groso modo es muy difícil de detallar.
Cárceles llenas de extranjeros
Otro de los agujeros por el que se marcha el dinero de los españoles se encuentra en nuestras cárceles, ya que en España tenemos actualmente 60.000 presos, de los cuales un 30% son extranjeros. La estadía en la cárcel supone al estado un gasto de 1.806€ por preso y mes, 21.672€ anuales. Extrapolando los datos nos arroja una cifra de 390 millones de euros. Hay además una mayor necesidad de seguridad, ya que al contar con un mayor número de habitantes, son necesarios más policías, bomberos, etc, pero esto sería muy complicado de calcular de forma directa.
Este pequeño resumen es simplemente una extrapolación de datos, que pasa muy por encima de otras materias, como gasto en justicia, aumento de deuda pública, pensiones, etc. Aún y con eso, la suma es alarmante; 14.275 millones de euros anuales.