Pedro Sánchez se ha llenado la boca pidiendo responsabilidad a Pablo Casado, solicitando su abstención en una posible nueva investidura en septiembre. Sin embargo, en las últimas horas hay una nueva fórmula que muchos españoles están pidiendo al Rey. Los partidos de derecha suman más escaños que el PSOE, y si no llega a ningún acuerdo con Podemos, serían la mejor opción de gobernabilidad para España.
El gobierno de coalición contaría con los escaños del Partido Popular, Ciudadanos, Vox y Navarra Suma. En total, 149 diputados que podrían tener más sencillo la formación de un Gobierno estable durante los siguientes cuatro años, con apoyos puntuales en el PSOE. Para que esto se llevara a cabo tan sólo sería necesario que Sánchez aplicase el mismo sentido común que él pide a los demás, y ordenara la abstención de su grupo parlamentario.
Teniendo en cuenta las palabras de Sánchez -que tampoco tienen ya demasiado valor-, en las que afirma que las negociaciones con Podemos no se retomarán, esta alternativa tiene mucho más sentido, y sería más beneficiosa para el futuro del país. Además, posiblemente recibiera apoyos superiores gracias al voto regionalista, con partidos como PNV, Coalición Canaria o el Partido Regionalista Cántabro, que accederían de buen grado a cualquier Gobierno sea del signo que sea siempre que respete sus intereses sin menosprecios con otras comunidades.
De hecho este ha sido el gran handicap de Pedro Sánchez con partidos como Coalición Canaria. Los regalos que intentó hacer en los presupuestos que nunca consiguió sacar adelante, en los que miles de millones iban a volar de Canarias a Cataluña, enfadaron a buena parte de los políticos insulares, incluso en sus propias filas.