Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, solamente tardó dos minutos en atacar a la derecha en su discurso de investidura.
El líder socialista, que defendió el feminismo, pidió frenar a la extrema derecha e insistió en perseguir a las empresas tecnológicas aumentando los impuestos que actualmente pagan en España, también defendió que España no debe tener fronteras, ni internas ni externas.
El aspirante a presidente del Gobierno, habló de seis retos que deben ser afrontados. Entre ellos metió el problema territorial existente en España. Para el socialista la única solución es acabar con las fronteras, tanto internas como externas: «¿Qué sentido tiene fomentar la división dentro de España y levantar fronteras internas cuando lo que hay que hacer es derribarlas?», dijo el presidente del Gobierno.
Es evidente que a Pedro Sánchez no le interesa que España mantenga su soberanía nacional. Aprovechó su discurso de investidura para pedir eliminar las fronteras externas #SesiónDeInvestidura pic.twitter.com/jlTtOfuEWs
— DiarioPatriota.com (@DiarioPatriota_) July 22, 2019
El presidente del Gobierno aseguró que la política migratoria de España «es eficaz» y propuso crear «un sistema común de asilo europeo». Además, el líder socialista pidió combatir la inmigración ilegal «desde la solidaridad».
Es evidente que Pedro Sánchez y la izquierda, quieren fomentar una España sin soberanía. Alguien tendría que recordarle que sin fronteras externas no hay soberanía, que sin soberanía ni fronteras no hay país y sin esos tres elementos, no hay Gobierno.
Desde formaciones políticas de derechas se recuerda que ahora más que nunca, las fronteras externas son claves para evitar la inmigración ilegal masiva, para garantizar la seguridad nacional y sobre todo, para proteger la Soberanía Nacional.