Este martes se ha conocido la decisión final del Tribunal Supremo sobre quién debe pagar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados. El Supremo, por 15 votos a 13, ha decidido que sea el cliente el que pague el impuesto a las hipotecas.
Esta decisión ha indignado a la extrema izquierda, que ha hecho uso de su habitual demagogia para calentar el ambiente y atacar a la institución pública.
Pablo Iglesias, líder de Podemos, con el apoyo del líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha hecho un llamamiento a los progres a salir a la calle para protestar contra la decisión del Supremo: «Gana la banca y pierden los ciudadanos. La independencia del Tribunal Supremo está en entredicho; la democracia debilitada. La vergüenza y la rabia deben convertirse en una gran movilización cívica para defender los derechos de la mayoría frente a los privilegios de una minoría».
Pero lo que deben saber los españoles es que el problema no es quien sea el responsable de pagar el impuesto, puesto que si lo paga el banco, tal y como pretende la formación morada, el banco subirá las condiciones generales de la hipoteca y ese impuesto se acabará pagando por doble.
La única solución factible es la que ha propuesto Santiago Abascal, presidente de VOX, pero que desde Podemos no se ha mencionado ni una sola vez. Eliminar el impuesto a las hipotecas.
Desde Podemos se prefiere crear tensión y odio con demagogia antes de solicitar a su amigo Sánchez que elimine un impuesto que no debería existir.