Donald Trump ha tomado una decisión que no ha gustado nada a las tres empresas españolas que estaban en el proyecto: ha decidido paralizar los 929 millones de dólares que se iban a destinar para la construcción de un tramo del tren de alta velocidad en el Valle Central de California.
El anuncio es un duro golpe para el proyecto, aunque podría no ser definitivo, puesto que Gavi Newson, gobernador de California, ha confirmado que llevará el caso a los tribunales al considerar «ilegal» la cancelación de fondos.
«Este es dinero de California, asignado por el Congreso, y lo defenderemos vigorosamente en la corte», ha dicho en un comunicado.
Además, Donald Trump ha asegurado que quiere recuperar los 2.500 millones de euros que se asignaron a California desde Washington para la construcción del AVE. En caso de conseguirlo, el proyecto quedaría prácticamente paralizado, al menos en el tramo de las localidades entre Bakersfield y Merced, de unos 240 kilómetros de distancia.
Trump ha explicado que la decisión se debe a las constantes demoras que ha sufrido el proyecto y la incapaciad para alcanzar las metas que se habían puesto en un principio.
«El fallido coste del proyecto del tren rápido en California, donde los sobrecostes han alcanzado niveles de récord mundial, es cientos de veces más caro que el muro que necesitamos tan desesperadamente», dijo Donald Trump.